En el comienzo del partido, se notó una superioridad técnica del equipo Xeneize, llegando a claras ocasiones de gol y manejando la pelota. De esta manera, a los 13 minutos del primer tiempo tras una habilitación fantástica de Romero, Orsini quedó solo dentro del área y definió con un bombazo al primer palo.
A medida que el tiempo pasaba, el juego de Boca fue cayendo mientras que el equipo rosarino comenzó a animarse y acumular situaciones de peligro contra el arco de Javier García. Tras varias ocasiones, a los 26 del primer tiempo, Guido Di Vanni ponía el empate con un cabezazo y generó dudas en todo el Xeneize.
En el arranque del segundo tiempo, Battaglia decidió que con los ingresos de los juveniles Medina y Velurtas vuelva a controlar el partido y encerrar en su propio campo al equipo rival. Más tarde, con los ingresos de Vázquez y Zeballos, Boca pasó a ser un equipo mucho más ofensivo que llegaba constantemente pero que echó a perder miles de ocasiones insólitas.
A los 22 minutos, Nicolás Orsini sería el hombre que traería la paz de vuelta para su equipo al poner por delante en el marcador a Boca, tras recibir un rebote que definió al segundo palo con su pie izquierdo. Este hecho obligó al equipo rival a buscar nuevamente el empate, permitiéndole a los dirigidos por Sebastián encontrar más espacios libres.
Al revés que como venía sucediendo en los últimos partidos, Boca siguió buscando definir el partido teniendo muchas ocasiones de gol muy claras y con un rendimiento bueno en todas sus líneas. Central Córdoba comenzó a sentir el cansancio y el Xeneize lo aprovechó con la frescura que ofrecen sus juveniles, el partido de Orsini y los pases de Romero. Gracias a este, a los 34 minutos, Vázquez recibió un pase largo de mitad de cancha que controló con su pecho dentro del área y definió fuerte al primer palo para poner el 3-1 en el marcador.
A los 38 del complemento, Juan Ramírez ingresaría en lugar de Óscar Romero, quien demostró todas sus condiciones entregando dos asistencias y se iría aplaudido del campo de juego.
Ya en tiempo de descuento, a los 46 minutos, Zeballos se iría solo frente al arquero y en el intento de amagarlo el arquero rival le cometería penal, el cual “El Changuito” intercambiaría por gol al definir al ras del piso a la izquierda del guardameta.
De esta forma, Battaglia y sus dirigidos supieron sacar adelante un partido que parecía más difícil de lo que parecía, pasando a la siguiente fase de la Copa Argentina, en la busca de defender el título. El próximo rival del Xeneize, saldrá del duelo entre Ferro Carril Oeste y J.J Urquiza.