Luego de varias idas y vueltas, Andrés Román será nuevo jugador de Boca. El Xeneize llegó a un acuerdo con Millonarios de Colombia y en las próximas horas, el defensor estará viajando a Buenos Aires para ser presentado.
Boca pagará una cifra cercana a los 1.5 millones de dólares por el 50 por ciento del pase. El club colombiano quiso quedarse con una parte importante de su pase para recibir dinero en una posible futura venta.
La llegada de Román es un pedido de Miguel Ángel Russo al Consejo de Fútbol tras los bajos rendimientos mostrados por Leonardo Jara y Julio Buffarini. La idea de Russo es que Román sea el lateral derecho titular de Boca y apenas se sume a las prácticas comenzará a ser parte del primer equipo.
Román es surgido de Millonarios y está en el club desde el 2017, acumulando 84 partidos oficiales con 6 goles y 5 asistencias. Su buen nivel lo llevó a ser citado a la Selección de Colombia y vale recordar que Russo lo tuvo en Millonarios, factor clave para que sea pedido.
A sus 25 años, Román jugará en Boca, donde lo esperan otros colombianos como Campuzano, Fabra, Cardona y Villa. Boca espera que el de Millonarios sea la solución a los problemas por el lateral derecho.
El lateral derecho de Millonarios arribaría hoy mismo a Buenos Aires para realizarse la revisión médica, firmar su contrato con el club y ponerse a disposición de Miguel Russo, el DT que lo hizo debutar en Primera en mayo del 2017. Pero, ¿cómo juega este colombiano de 25 años que llega con posibilidades reales de ser titular en la Copa?
Lo primero que hay que decir es que Román es un jugador de características más ofensivas que defensivas. Al colombiano le gusta pasar al ataque, proyectarse, asociarse en campo rival y desenfundar su potente remate desde mediana y larga distancia. De hecho, lleva convertidos seis goles en 84 partidos, un promedio nada despreciable teniendo en cuenta que Julio Buffarini, por caso, suma dos gritos en 93 juegos en Boca y Leonardo Jara, otro par en 101 presentaciones. Román también es de meter diagonales de afuera hacia adentro y acompañar cada ataque ingresando al área por sorpresa.
Otro punto distintivo del defensor cafetero es su rapidez. En ese sentido, no tendría nada que envidiarles a los actuales laterales de Boca. Además, su buena talla (1,85, lo mismo que Zambrano y dos centímetros menos que Licha López) y su potencia física le permiten recorrer varios metros en pocos segundos y marcar así una importante diferencia de velocidad con respecto a sus rivales. Y tiene facilidad para sacarse de encima la marca empleando sus brazos y cabecea en las dos áreas.
En Boca, a su vez, creen que el reciente llamado a la selección de su país le dará el roce internacional que por ahora no tuvo: apenas jugó cuatro partidos por Sudamericana.
El problema de Román es el retroceso, la vuelta. El aspecto defensivo de su juego. “Es como Fabra pero por derecha, la marca no es su mejor virtud”, se animan a contar desde Colombia, aunque también advierten que para un equipo protagonista como Boca, Román puede ser una pieza más que importante para sumar herramientas en ataque.
El colombiano debutó en 2017 y jugó siempre en Millonarios. Y hay un tema que no es menor. Los mejores rendimientos de Román se vieron en Bogotá, en los 2.580 metros sobre el nivel del mar. Incluso, es nacido en la capital colombiana. Y allí es donde mayor facilidad tiene para hacer prevalecer sus cualidades físicas. Pero Russo lo marcó y Riquelme le levantó el pulgar. Boca ya tiene a su segundo refuerzo. Ahora habrá que verlo en la cancha.
✅💣 CONFIRMADO | Andrés Román será el SEGUNDO REFUERZO de #Boca.
➡️ Llegará mañana al país. Se hará la revisión médica y firmará su contrato por 3 años.
➡️ Boca compró el 50% de su pase en 1,4 millones USD.
🎥 ¿Quién es Andrés Román? ¡Mirá! 👇🏻https://t.co/fmArJ4oiZC pic.twitter.com/dgLIgbjIG7
— Eterno Boca (@EternoBoca12) February 17, 2021