De buenas a primeras, el doble 9 sorprendió a más de uno teniendo en cuenta cómo venía jugando el equipo. Esa misma reacción, daba pequeñas pistas de lo que iba a ser el desarrollo del partido.
Un primer tiempo realmente pobre del conjunto dirigido por Almirón. No era profundo y sufría mucho la falta de un volante más en el mediocampo. Sumado a esto, Advíncula no se halló en esta primera mitad, y Benedetto no estuvo fino en los pases a la hora de salir del área y generar conexiones sobre todo con los volantes. En muchos tramos, Varela y Medina se veían superados frente al viaducto que sí contó con tres en el medio, destacando el trabajo de Toloza.
Pese a ello, el técnico decidió que no había que hacer variantes. Sólo una obligatoria que fue el ingreso de Valentini por Figal debido a una lesión. Así, a los 25 minutos el xeneize sufría la caída de su valla luego de una pelota parada donde, Pombo establecía el 1-0 que, se justifica más por el bajo rendimiento de Boca que por un mérito del local.
La defensa del equipo de la Ribera volvió a mostrar falencias: Valdéz con claras dificultades a la hora de marcar, y Figal que nuevamente no estuvo fino. De los laterales poco y nada que resaltar: Fabra sigue llegando tarde a las jugadas, y hoy quedó muy expuesto en los ataques de Arsenal, su faceta ofensiva sigue siendo lo más resaltable; mientras que Weigandt tuvo un mal rendimiento y en ataque siempre le falta para terminar de convencer.
Para el segundo tiempo, el ex director técnico de Lanús insistió con los mismos jugadores que habían abandonado la cancha en el primer tramo del partido. Sin embargo, el propio desarrollo del encuentro dejaba a las claras que, al menos hoy, su plan no funcionó. Fue la expulsión de Weigandt (polémica cuanto mucho), lo que logró mover un poco el banco y generar los ingresos de Langoni y Equi Fernández por Varela y Benedetto. Boca continuó con dos jugadores en el mediocampo, pero un ligero cambio se notó. Langoni, pese a no llegar a ser lo suficientemente profundo, intentó y logró darle otro aire al sector derecho del campo xeneize.
Advíncula volvió a jugar de lateral por derecha y su influencia en esta parte fue casi nula. Por el lado de Equi, logró darle mayor agresividad a los ataques y tuvo sus buenos momentos, pero el partido parecía tener un claro destino.
De esta forma, Boca volvió a perder luego de cuatro fechas, y quedó en la 9na posición a la espera de que se jueguen los partidos restantes de la fecha. Hoy por hoy, las chances de llegar a pelear el campeonato parecen lejanas y el objetivo principal estaría puesto en clasificar a la próxima edición de la Copa Libertadores.
Para ello, será clave conseguir los tres puntos en la próxima fecha, donde recibirá a Lanús en la Bombonera a partir de las 20 hs el día sábado 10 de Junio. Previo a ello, jugará también de local frente a Colo Colo por la Conmebol Libertadores, certamen donde está mejor posicionado y en el que también buscará la clasificación de ser posible antes de que finalice la fase de grupos.