En el marco del primer partido post Copa del Mundo, el vigente ganador de este título celebró con su gente la obtención del campeonato, derrotando a Panamá en el estadio “Más Monumental”.
Todo fue fiesta y alegría, el Estadio Antonio Vespucio Liberti se vistió de gala con una previa y un post partido para el recuerdo. Los jugadores pudieron jugar en su tierra y lucir el parche de Campeón del Mundo en un amistoso que, más allá de su carácter no oficial, emocionalmente significaba mucho.
Scaloni repitió los once titulares que saltaron a la cancha aquel 18 de diciembre pasado, en tierras qataríes y frente al vigente campeón del certamen. El técnico se tomó con seriedad el encuentro y no probó jugadores, quería que los mismos que jugaron en aquel entonces, hoy tuvieran su merecido reconocimiento, obviamente junto con quienes acompañaron y también -desde su lugar- aportaron a la coronación.
Para sorpresa de la mayoría, dentro de la cancha la visita mostraba una dura cara: demostró que, pese a los festejos y demás, iba a hacerle frente a una selección que, por momentos, sufría imprecisiones y desatenciones en un marco donde todo era fervor y alegría.
Esa extraña mezcla derivó en que, pese al ser el equipo con las llegadas claras, se topará siempre frente a una Panamá que sabía defenderse, y también jugaba con la suerte a su favor. No pateó al arco, pero hasta cierto momento, tuvo a la Argentina perpleja ya que no podía conseguir el grito sagrado.
Aquel, llegó recién a los 78 minutos de partido. Luego de un tiro libre de Messi que pegó en el travesaño, Paredes falló en el rebote y Thiago Almada -que había reemplazado a Mac Allister- mandó la pelota a la red estampando, para la alegría de todos, el primer gol del partido.
Once minutos después, ahora si con el seleccionado argentino teniendo mayor frescura y dinamismo en el ataque, Lionel Messi tuvo su chance a través de un tiro libre y, como es costumbre, hizo levantar a todos de sus asientos y festejar el segundo tanto que, a estas alturas, ya le daba un cierre al partido. Convirtió el gol número 800 de su carrera.
Finalizado el encuentro, hubo una ceremonia con todos los campeones del mundo y sus familiares. Tanto el enganche, como Scaloni, hablaron con respecto al mundial y el cariño que le ha brindado la gente a lo largo de todo este recorrido.