Boca venció como local al CEF 5 de La Rioja en tres sets corridos y avanzó a la final de la Liga Argentina Femenina.
En un partido que desde la previa parecía que sería más disputado, las Guerreras apretaron el puño y supieron ver las falencias del conjunto riojano.
El primer set fue lo que se preveía; mucho juego de ida y vuelta, con errores mínimos de ambos lados. La organización fue la clave, y la atención e inteligencia a la hora de saber dónde lastimar al rival. Lastimar no siempre es atacar y eso Boca lo entendió tarde, intentó atacar un bloqueo fuerte y lo consiguió solamente cuando supo engañarlo.
En el segundo set, las Guerreras iniciaron obligando al CEF al error, que con paciencia supo descontar. Los puntos largos continuaron; pelotas en pipe para Agostina Beltramino, Chuchi Corbalán desde posición uno y Chu Cossar cerrando con su experiencia desde la punta delantera. Por su parte, Julieta Holzmaisters desde el centro estuvo rápida y precisa no solo en el bloqueo sino también en el ataque.
Una virtud enorme de Boca es el poder de rotación rápida, porque eso permite sumar pero también evita que el rival siga la racha. La diferencia de diez puntos hizo que nuevamente el CEF se equivoque mucho, y más Xeneizes cerraron el set por 25-17.
El tercer set inició muy parejo, más Naranjitas no te una margen de error y lo sabían, pero las Guerreras no aflojaban. Los bloqueos de Agostina Beltramino le dieron respiro al equipo, pero los saques de Romero hicieron que el conjunto riojano se levante.
En la segunda mitad del set comenzaron los errores de ambos lados, se notaba el nerviosismo, pero la determinación de Boca no falló. Nuevamente la opuesta Corbalán hizo de las suyas para mantener al Xeneize arriba, y el equipo entero en todas sus líneas fue casi perfecto.
De esa manera, con garra e identidad, Boca supo cerrar el partido en tres sets corridos y se clasificó a la final de la Liga Argentina, donde se medirá contra Gimnasia de La Plata que le ganó en el tie-break 15-9 a San Lorenzo.
