En general, cada vez que habla Carlos Tevez deja algún título importante. En ocasión de la premiación de esta tarde, donde Boca recibió la Copa de la Superliga 19-20, parecía reinar más un ambiente de liviano festejo protocolar que una tarde de palabras fuertes. Pero Carlitos nunca decepciona y cuando le preguntaron si esta versión suya se podía comparar con la del 2003 en Boca o la de Juventus en 2015, soltó una frase que podría preocupar al hincha:
“No creo que se pueda comparar, cada temporada es nueva para mí. Uno se prepara de distintas formas y uno siempre es diferente. No es el mismo Tevez el que ganó el primer título que el que ganó éste, que puede ser el último. Este Tevez actual trabaja para ser la mejor versión”.
El “Apache” es un jugador de 36 años con mucho recorrido en su carrera (28 títulos, el tercer argentino más ganador) quien además manifestó públicamente que estaba en el final de su carrera en reiteradas ocasiones y estas palabras no deberían causar demasiado asombro. El impacto que tiene esta frase tiene más que ver con el contexto que atraviesa el club que se encuentra en la antesala de lo que serán los duelos de octavos de final de Copa Libertadores contra Internacional de Brasil, torneo de esquiva consagración para Boca y también para Carlitos desde su vuelta en 2015.
Igualmente, y para traer un poco de tranquilidad al hincha xeneize, aclaró que se siente muy bien con su actual nivel y también con el del equipo y ante su ausencia en la convocatoria de hoy para el partido con Lanús agregó:
“Hay que dejar que los chicos sumen minutos, que jugadores como Mauro (Zárate) y Wanchope (Ábila) tengan rodaje porque necesitamos de todos. Aparte viene bien parar un poco, sobre todo por la edad, aunque me siento muy bien. Estoy espléndido”.
Por último, mostró su alegría por recibir otro trofeo con Boca, pero rápidamente se metió en el partido contra Lanús, demostrando que está enfocado en lo que se le viene al equipo:
“Ya sabíamos cómo era la premiación, pero cuando el árbitro inicia el partido ya está, se termina todo. Ahí ya no hay excusas”.