Tal como se promulgó durante toda la campaña electoral y en sus primeros meses como mandato, esta dirigencia busca estar más cerca de las necesidades de los jugadores. Por eso, desde la comisión directa de Boca empezaron a tomar cartas en el asunto por Junior Alonso.
Hace unos días y por un cruce con un embajador en el consulado Paraguayo, vía twitter, salió a la luz unos de los problemas que someten al zaguero guaraní. Si bien el jugador cuenta ya con el permiso del club para poder viajar a su país natal, no posee la autorización del gobierno paraguayo para ingresar a su nación.
El motivo principal es el cierre de las fronteras y la cancelación de vuelos por la pandemia mundial que se vive. Por eso desde el club buscarán la manera para poder facilitar el viaje hacia asunción y permitir al jugar estar en su domicilio con su hija y su esposa.
No solo también se encuentran atareados con esta situación personal de Alonso, debido a que el 30 de junio se vence el préstamo y la opción de compra acordada con el Lille francés. El importe que Boca deberá abonar es de cuatro millones de dólares, por el cual ya Miguel Ángel Russo solicitó su permanencia en el club para lo que viene.
Así es la situación del defensa de 27 años, que se transformará en pilar del equipo en estás ultimas 7 fechas tras la lesión de Lisandro López. El jugador manifestó sus ganas de quedarse. ¿Podrá Boca hacer el esfuerzo y cumplirle el deseo a Miguel?
