Lejano quedó ese pasado 7 de marzo, día en el que Boca le arrebataría el titulo a River en la última fecha. Esa noche en La Bombonera, los liderados por Russo pudieron dar la vuelta con su gente, pero como no había un campeón matemático, la AFA decidió no trasladar el trofeo ni al estadio del Xeneize ni a Tucumán donde jugaba River.
Con Boca ya campeón tampoco se pudo entregar el trofeo. ya que su primer partido fue contra Godoy Cruz en Mendoza, aquel recordado 1-4 a favor de Boca, en la primera fecha de un torneo que próximamente se vería suspendido por la llegada del Covid-19.
Con la aparición de la nueva Copa de la Liga Profesional se tomó la decisión de entregar el trofeo en la primera localía del cuadro Xeneize. Después de jugar contra Lanús y Newell’s en condición de visitante, todo indicaba que el pasado domingo contra Talleres se haría entrega del tan esperado trofeo.
Sin embargo, un pedido de Miguel Ángel Russo hizo que este se aplazara unos días más. El entrenador de Boca pidió que la premiación se realice en la próxima fecha, porque para ese entonces estarían los jugadores que se fueron a sus selecciones. (Esteban Andrada, Frank Fabra, Jorman Campuzano y Edwin Cardona)
Después de tantas idas y venidas, este viernes 20 de noviembre será la tan esperada premiación. Boca se enfrentará a Lanús por la cuarta fecha del campeonato local, y para ese entonces habrán pasado 258 días entre la obtención del campeonato y la premiación.
Para el encuentro del viernes, Boca contará con las bajas de Agustín Obando y la de “Cali” Izquierdoz por las expulsiones sufridas en el partido de este último domingo contra Talleres. A esta lista se le suma la baja de Pol Fernández, que por su problema contractual de no seguir en el club después de diciembre, no está siendo considerado por el cuerpo técnico.
